Victoria de Saldivia y

Ganó Montiel y espera por Donaire

Impactante triunfo por KO2 de Fernando KOchulito Montiel ante Giovani Soto.

El Campeon gallo unificado envio dos veces a la lona a su rival, cuando ya lo tendio en la lona en el primer asalto.

De esta manera, el Rey de los gallos espera por Nonito Donaire, que ya le ganó a Sydorenko.

El objetivo de Donaire al medirse rápidamente con un boxeador de fuste en las 118L, era tomar el impulso adecuado antes de pasar al desafío mayor de su carrera: ir por toda la torta retando al campeón actual de la OMB (WBO) y CMB (WBC), el mexicano de Los Mochis, Fernando “KO-chulito” Montiel, compromiso pactado para el próximo 19 de febrero de 2011.

El cruce entre la rapidez de Nonito Donaire Jr. y la potente pegada de Fernando Montiel, se convierte en una inevitable incógnita a dirimir en febrero de 2011. Promete ser un choque dramático de estilos que podría alcanzar ribetes legendarios y apuntalar el mejor comienzo imaginable para la nueva temporada.

SALDIVIA GANÓ Y AHORA IRÁ CONTRA LUJÁN EN MARZO !!!!‏

El campeón argentino de los welter, el chubutense Héctor Saldivia (66,300 kg) retuvo su corona al vencer por nocaut técnico en el quinto asalto al cordobés Jorge Miranda (66,500) en la pelea estelar de la velada desarrollada el viernes 10 de diciembre en el estadio Socios Fundadores de Comodoro Rivadavia.

Luego del final de la pelea y sobre el mismo ring, el promotor Mario Arano reveló que el 11 de marzo, Saldivia peleará contra Sebastián Luján, en Comodoro, por la corona argentina. El anuncio lo hizo junto al manager de Luján, Carlos Alanis, con quien firmó el acuerdo para el mega evento en la tarde del mismo viernes 10.

Desde el comienzo del combate Saldivia dominó a su rival apoyado en su puntería y velocidad. Desde el primer asalto, el cordobés debió penar con una intensa hemorragia nasal y el constante castigo del comodorense en la zona herida.

Miranda, sin embargo, vendió cara su derrota e intentó plantarse y cambiar golpes con un campeón que lució muy sólido.

Ya en el descanso del tercer al cuarto round, el entrenador de Miranda Carlos San Miguel quería retirar a su pupilo de pelea, aunque el ruego del púgil fue conmovedor y convenció a su DT para poder seguir.

El cuarto round siguió en la misma tesitura con un Saldivia dominante y un cordobés que bañado en sangre buscó por todos los medios revertir lo que resultó inevitable y antes de comenzar el quinto, San Miguel decretó el abandono de su boxeador y el consiguiente KOT 5.

En uno de los semifondos, el local Roberto Moreno (72,700) venció por puntos al santafesino Julio César Cáceres (70,600) tras seis intensos rounds que tuvieron una extraña particularidad: en el segundo asalto y luego de un violento cruce, ambos se fueron a la lona simultáneamente y visiblemente sentidos, aunque los dos derrotaron la cuenta de protección segundos antes del final del round.

En otra intensa pelea igualaron en seis vueltas, en peso welter, el cordobés Diego Ledesma y el rosarino Leandro Albornoz en fallo no unánime.

Además, el rosarino Pablo Barboza (58,800) superó por KOT 2 al rionegrino Miguel Samgueza (57,200); el chubutense Cristian Gramajo (61,400) KOT 2 al rionegrino Roberto Cafre (62.400); el chileno Pedro Saldías (63,200) noqueó en el primero al santafesino Luis Medina (64,500) y, en un combate espectacular, el bonaerense Gabriel Ramírez (55) le ganó por puntos al trelewense Manuel Neculhueque (56,200).

A 15 años de una batalla épica para el deporte argentino

La victoria del argentino Jorge Locomotora Castro ante el norteamericano John David Jackson sobre suelo mexicano, en la que se disputaban dos títulos mundiales, es una de las mejores de la historia con un final digno de un guión de cine.

Jackson y Castro

La noche del 10 de diciembre, en el estadio de Beisbol de la ciudad mexicana de Monterrey, sería consagratoria para Jorge Fernando Castro, o Roña, como lo conocían en su Caleta Olivia natal, o Locomotora, como lo bautizó un periodista.
Una pelea que tuvo a Jackson en una gran forma física y con la que aprovechó ante un Castro que por momentos “parecía cansado”.
Los primeros ocho rounds del combate tuvieron a maltraer al argentino que no podía esquivar los golpes de Jackson, ni tampoco colocarlos de manera certera.
Los minutos pasaban y se acercaba el noveno round, donde Castro sentido y sientiendo el trajín de la pelea, apostaba a secarse la sangre en la camisa de Stanley Christoudolou, un árbitro que había impartido justicia en otras epopeyas del box argentino.
Víctor Emilio Galíndez o Santos Falucho Laciar habían apoyado sus rostros sobre otra camisa de Christoudolou, como Castro lo hizo en la noche de Monterrey.
Cuando el árbitro del combate estaba por parar la pelea Jackson ya palpitaba con la victoria, aunque no pensó lo que tenía guardado el argentino, que ante los ojos del mundo iba a demostrar la “pasta de campeón”.
En un ataque certero del norteamericano, Castro se fue contra las cuerdas y casi sin demasiado recorrido del puño derecho del patagónico impactó en la sien derecha y produjo que el rival se desplome y quede boca arriba.
Luego, ante la cuenta del árbitro y de la vuelta a la pelea, el argentino le conectó un derechazo a la mandíbula que lo tiró en la lona del estadio mexicano.
Para el final, Castro tenía que tirarlo, le pegó un pleno para decir basta y lograr lo que nadie esperaba: la impresionante victoria del calentense ante un rival que llegaba como favorito.
El momento del festejo se pareció a una pelicula de Hollywood, en la que el protagonista se lanza sin recorrido por el ring y levanta los brazos como si agradeciera al cielo por lo que ocurrió.
Para los medios boxísticos del mundo la pelea entre Castro y Jackson fue la mejor de ese año 1995 y una de la más recordadas de la historia del pugilismo argentino.

John David Jackson vs Jorge Castro pelea por el título Mundial